Antes de comentar nada, creo yo que lo mejor es que le echéis un vistazo al siguiente vídeo:
Que el C5 es un hito de la automoción es algo que ya nadie pone en duda. Sus singularidades, paradójicamente unidas a su enorme fracaso comercial, han terminado convirtiéndolo en un icono cuya popularidad entre los aficionados a los vehículos clásicos aumenta día tras día. Sin ir más lejos, el pasado julio tuvo lugar en Holanda la primera concentración internacional de propietarios de C5, que congregó a un número sorprendentemente alto de participantes. A buen seguro que Sir Clive, desde su lujoso apartamento londinense con vistas a Trafalgar Square, estará esbozando un gesto de satisfacción: “¿Veis cómo tenía razón, capullos?”. En fin, más vale llegar tarde que no llegar.
Y para la próxima, que los responsables del Santa Pod avisen a este otro tipo para que monte un chou allí.