Sobre todo cuando te buscas “amiguetes” entre los diversos y variopintos grupúsculos de inadaptados que veneran a Sir Clive como un dios y a sus creaciones como un milagro. Sólo gracias a gente así es posible enterarse de la existencia de vídeos como este, ocultos en los inmensos lodazales del Youtubarro y demás inventos similares:
Un video que viene que ni pintado en el año durante el cual se conmemora el treinta aniversario del ZX-80. El ZX-80 era un auténtico fistro de ordenador, pero sentó las bases de la revolución que introduciría a los hogares europeos en el mundo de la informática, contribuyendo a reducir la distancia sideral que entonces nos separaba de yankis y nipones, mucho más familiarizados con esa rama del conocimiento destinada a acabar con la humanidad.
Que alucine cuando conecta el teclado y el TV 🙂
Flipante. Jamás imaginé que un ZX-80 sería capaz de semejante cosa :p.