En 1985 la compañía Systen 3 lanzó International Karate como apresurada respuesta a Exploding Fist, con la nada velada intención de aprovechar su inconmensurable éxito en beneficio propio. Pese a sus defectos, que evidenciaban las prisas con las que se había lanzado, logró su objetivo en buena parte y eso justificaría una secuela dos años después.
Es muy curioso comprobar cómo International Karate Plus (o IK+ para abreviar) motivaría una respuesta de su competidor en la forma de un Explding Fist + que copiaría su mismo esquema. El copiado convertido en copiador, lo que son las cosas. IK+ no era un mal programa, pero dado que su autor había firmado una medianía como Howard el pato, tampoco cabía esperar ninguna joya de la programación, sino más bien otro juego en la misma onda. Adecuado para un rato de asueto y poco más.