Hace algún tiempo comentábamos algo acerca de las todavía novedosas impresoras 3D y sus aplicaciones en la informática clásica. Poco a poco, el uso de estas máquinas se va expandiendo conforme baja su precio, tal como sucede siempre cuando de tecnología se trata, y ahora nos llega desde Italia este bonito ZX-80 que sería perfecto para un llavero o un colgante:
La foto está sacada de aquí y la descubrí a través de un grupo de Facebook integrado por aficionados italianos a los ordenadores Sinclair. Ya va quedando menos para que cualquier día podamos imprimir uno que funcione de verdad y trastear con él en casa. Suena a ciencia ficción, pero en los primeros años 80 nadie se imaginaba que estaríamos donde estamos.