Y no, no nos referimos a esto:

La historia del PC 200 es harto conocida entre los buenos aficionados a la retroinformatica y los ordenadores Sinclair. A finales de 1988 estaba claro que a los venerables micros de ocho bits, dueños del mercado hasta entonces, les quedaba ya poco tiempo de vida. Ante la evidencia, los cerebros pensantes de Amstrad tuvieron la idea de evolucionar el concepto puesto en práctica dos años antes con el Spectrum +2 (básicamente un Spectrum de 128 Kb metido en la carcasa de un Amstrad CPC), e introducir la marca Sinclair en el creciente mercado de los 16 bits, los ordenadores de nuevo cuño que empezaban a adueñarse de los hogares. Tomaron el PC más sencillo de su gama (el PC 20, ya entonces virtualmente descatalogable por anticuado) y rediseñaron la carcasa para darle el aire de familia propio de los ordenadores Sinclair, pintada en negro en vez de en el anodino gris claro original. Bastaba con añadir un cero a la denominación del modelo y ¡voila!, ya teníamos un «nuevo» compatible PC listo para convertirse en el Spectrum de la nueva generación bueno, bonito y barato. Sin embargo había un problema.

Aunque sólo habían transcurrido unos pocos años, el mundo había cambiado mucho respecto al que existía cuando el Spectrum vio la luz. Mijail Gobachov había dinamitado el Telón de Acero y su último símbolo (el muro de Berlín) estaba a punto de caer. La crisis económica que había marcado los inicios de la década comenzaba a ser historia y la gente tenía algo más de dinero en los bolsillos que antes. Y la electrónica de consumo, que realmente empezaba a ser de consumo masivo tal y como la conocemos hoy, había bajado de precio drásticamente. Los tiempos del Spectum visto como el Seat 600 de los ordenadores domésticos habían quedado atrás y ya no había necesidad de escatimar comprando un PC barato y pobremente equipado cuando, por un poco más, se podía acceder a máquinas con presencia y prestaciones superiores. El ahorro no merecía la pena y así fue como el PC 200, publicitado como «la máquina alucinante de videojuegos» montando una gráfica CGA de cuatro (4) colores, lastrado por taras de diseño esperpénticas como la imposibilidad de cerrar la carcasa cuando se añadían tarjetas de expansión, acabó su andadura comercial con un estrepitoso fracaso que hoy, paradójicamente, lo ha convertido en un ordenador muy codiciado entre los coleccionistas dado lo poco (y mal) que se vendió: sólo 20.000 unidades en el transcurso de unos cuantos meses.

Un PC 200 con su «portón» levantado. La foto está sacada de aquí por si os interesa ver algunas más. 

Así concluía la azarosa vida de la marca Sinclair, con el PC 200 como último (y tristemente lamentable) representante de una estirpe mítica de ordenadores domésticos. O eso creímos todos, porque resulta que no fue así. Ya no hablamos del PC 500, que no era más que el viejo Amstrad PC 1512 de 1986 remarcado y que resulta aún más raruno de ver que el anterior. Muchos acérrimos seguidores de Sir Clive y la que un día fue su empresa desconocen la existencia de otro compatible PC lanzado en 1993, cinco años después del PC 200 y el 500. Yo mismo no sabía nada de él hasta que un día, hace mucho tiempo, encontré referencias en Internet por pura casualidad.

Se trata de un Amstrad 386SX cuya arquitectura es idéntica a la de otros compatibles de la época, pero que posee un claro rasgo distintivo que lo destaca frente al resto: el logotipo de Sinclair presente en la caja del equipo. Esto vendría a demostrar que quienes se refieren al PC 200 como «el último ordenador de Sinclair» no están en lo cierto… O si. Porque ante la discreta presencia del logo, supeditada a la marca de la casa matriz y en pequeñito (aunque esté ahí) y la total ausencia de aires familiares, es lícito preguntarse si de verdad estamos ante una máquina Sinclair antes que frente a un PC Amstrad apresuradamente «maquillado», cuyo origen reside en este singular engendro nacido de una joint venture con Sega para construir un híbrido entre PC y Megadrive (la placa necesaria para emular la consola desaparece en el ordenador Sinclair).

Sea como sea, ello no resta valor a una máquina tan rara que incluso hoy, cuando parece que toda la información del mundo mundial está al alcance de un click de ratón, resulta casi imposible encontrar nada acerca de este aparatejo. Yo al menos he sido incapaz de encontrarla más allá de unos pocos (y breves) artículos. Ni siquiera aparece referenciado en la web oficial de Amstrad. Todo apunta a que su carrera comercial fue tan corta como poco distinguida. Por aquel entonces, y pese a contribuir decisivamente a la popularización del formato PC años atrás gracias a modelos como los 1512 y 1640, incluso Amstrad tenía dificultades para resistir la feroz competencia de los compatibles de «marca blanca» montados y vendidos por pequeñas tiendas de informática.

Nadie sabe realmente de donde surgió la idea de este 386 «by Sinclair». En 1993 el Spectrum quedó oficialmente descatalogado, aunque había dejado de fabricarse bastante antes. Muchos de sus aún propietarios empezaron a cambiarse al PC cuando estuvo claro que sería el estándar de la nueva era tras imponerse a los Atari y Amiga, por lo que cabe pensar que con esta jugada Amstrad buscaba mantener en su redil a viejos clientes apelando al cariño que estos sentían hacia el venerable Speccy. Desde luego a muchos les hubiese seducido la idea de dar el salto hacia la modernidad sin abandonar la marca Sinclair. Y además bien dado esta vez, gracias a una máquina de apariencia muy decente, como mínimo a la altura de sus rivales. Una cosa es segura: dado que este equipo ha de tener potencia para correr un emulador como el de Pedro Gimeno, por fuerza tiene que resultar curioso enfrentarse a la posibilidad de «jugar al Spectrum» usando un PC de Sinclair…. aunque lo sea únicamente por un logo en la caja.

5 thoughts on “¿El último Sinclair?”
  1. Información Bitacoras.com

    Valora en Bitacoras.com: Y no, no nos referimos a esto: La historia del PC 200 es harto conocida entre los buenos aficionados a la retroinformatica y los ordenadores Sinclair. A finales de 1988 estaba claro que a los venerables micros de ocho bits, d..…

  2. Hola tengo un sinclair pc 200 sería una caña poderle poner un emulador de spectrum, se que había uno para msdos…. Un saludo… Y una pena no se hicieran más y no hubiese sido un verdadero híbrido de spectrum y pc

  3. Pues si tienes uno entonces eres una persona afortunada porque se trata de un verdadero objeto de coleccionista. Dadas sus características y el procesador que monta, el PC200 no puede ni con emuladores sencillos como el de Pedro Gimeno, y no me consta que se desarrollase algún emulador específico para él.

  4. Hola. Estamos gestionando la venta de varias colecciones de retroinformatica y precisamente nos enviaron un Sinclair PC200 con su raton original y con su pantalla original, es decir el pack completo, pinta genial aunque aun no hemos tenido tiempo de trastear con el. La pregunta es la siguiente. Estamos sondeando el mercado pero hemos encontrado poca cosa para hacer una valoracion de este pack porque solo hemos encontrado un PC200 pero sin raton sin monitor y con varios pequeños desperfectos (y nos da la impresion que sin disketera) por el que piden 600. En tu opinion y experiencia, ¿cuanto crees que costaria un pack como el que nos han enviado a efectos de subastarlo?
    Gracias

  5. No os voy a dar una estimación por razones obvias. En estos asuntos todo queda a discreción de vendedor y comprador.

    Gracias por el comentario y un saludo.

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