Bueno, pues al fin llegó la tan esperada Retroencounter, destinada de algún modo a sustituir a la tradicional feria RetroMadrid, ausente a su cita anual con la capital de España por vez primera desde 1995. El mundo de la retroinformática estaba expectante además de aliviado cuando se anunció el evento, ya que tras hacerse pública la suspensión de RetroMadrid a principios de 2011, muchos pensamos que la ciudad se quedaba sin “festis” de este palo. El resultado final puede calificarse como sorprendente, habida cuenta de que el sarao se organizó por iniciativa de un grupo de aficionados (los chicos de ViejuNET) que dispuso de muy poco tiempo para reunir a los posibles participantes y organizar todo de un modo aceptable. En este sentido hicieron una gran demostración de capacidad, tanto de convocatoria como de organización, logrando atraer a un buen número de expositores dispuestos a mostrar cosas interesantes, consiguiendo un garito adecuado donde meterlos a todos sin apretones y ganándose el favor del público asistente, todo ello sin fallos dignos de nota.

Sí, lo hemos visto y fotografiado mil veces, pero no se puede acudir a un evento como este y marcharse sin haberle hecho otra foto más. No cansa.

Personalmente, y aunque soy consciente de que las comparaciones son odiosas, me resulta imposible nombrar esta Retroencounter sin hacer mención a RetroMadrid, puesto que Retroencounter jamás se habría celebrado si RetroMadrid 2011 no se hubiese suspendido. No obstante hay que dejar claro que Retroencounter tuvo la suficiente entidad propia como para desligarse de cualquier evento pasado, y en opinión de muchos visitantes recuperó el “sabor casero” ausente en RetroMadrid 2010. Los viejos ordenadores domésticos de los ochenta volvieron al lugar preponderante perdido el año anterior en favor de videoconsolas más modernas, y la casi nula repercusión del evento lejos de los ambientes retroinformáticos disminuyó la presencia de público casual virtualmente a cero. Todos estos detalles fueron agradecidos por los más puristas, que en más de un caso habían mostrado su descontento por la presencia en la Retro 2010 de demasiados “niñatos” y por el ambiente demasiado masivo y profesional que, en su opinión, tuvo aquel certamen. De este modo, Retroencounter se llenó de viejos conocidos entre expositores y visitantes, en un ambiente más próximo al de una reunión de antiguos alumnos universitarios que al de una feria propiamente dicha. Con todo, no tuve la sensación de “esto ya le visto” que viví durante la RetroMadrid de 2008, porque hubo suficiente variedad de expositores y suficientes novedades y eventos como para hacer muy entretenida la visita.

Con este Commodore tuneado puedes saber lo caliente que te pones jugando con el strip poker de Samantha Fox.

Gran trabajo el de los chicos de ViejuNET con esta Retroencounter, que demuestra que no solo la AUIC es capaz de organizar “retrosaraos” de calidad en Madrid. Sin embargo todo apunta a que pasará a la historia como un puente tendido entre dos ediciones de RetroMadrid, a no ser que la organización desee repetir la experiencia el año que viene y busque un hueco en el calendario, puesto que si nadie confirma otra cosa RetroMadrid volverá a celebrarse en 2012 dentro de sus fechas habituales, y no albergo duda de que esa feria debe seguir adelante: sería una pena que el legado y la identidad de un evento tan veterano, que había alcanzado niveles de madurez y estabilidad envidiables tras unos años muy convulsos, se perdiese en el entramado del GameFest, donde presumiblemente se encuadrará este 2011. Ya se vio el año pasado que un tinglado retro no termina de encajar dentro de una estructura tan profesional y tan abierta al público general. Tal y como escribí en su momento, el término medio es y debe ser la justa medida de todo, pero más aún si se trata de eventos como los que nos ocupan.

Accede al álbum de fotos de Retroencounter 2011.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.